Por lo que yo sé de este y otros relojes clásicos, el nº de serie del calibre y el de la tapa no tienen por qué coincidir, pero ya te ha contestado a esto muy bien diegclem. El reloj es precioso y es un relojazo. Los índices horarios son muy bonitos, este es uno de los detalles que me gusta ver en los relojes antiguos, hay infinidad de formas en los índices. El calibre 30L es de los calibres clásicos más afamados de su época en su nivel, y a mi me parece un movimiento muy bonito; el volante grande con tornillos, las formas del puente de rodaje, las inscripciones doradas en el puente...me pasa como con el calibre de Certina 28-10, que además de bueno y fiable me parece muy bonito.
El reloj sí me parece un poco caro para el estado en que está. Más que nada la caja está muy gastada, la corona igual, y debe ser difícil darle cuerda sin que resbale entre los dedos...las esferas con algo de pátina tienen su aquel, y es bonito ver una esfera toda original, con sus inscripciones de la época y todo, pero esta para mí estaría mejor bien restaurada. Yo tengo algún reloj de esa época con pátina en la esfera, pero más leve que la de ese Longines, y el resto del reloj está bastante mejor (caja rechapada y corona menos gastada, plexi nuevo,...); Creo que el Longines habría que restaurarlo (caja, esfera y corona) y revisar bien la maquinaria, para poder disfrutarlo. En un buen sitio por supuesto, como el taller de Pedro Izquierdo por ejemplo, pues la pieza lo merece. Pero eso encarecería bastante el reloj, y si no es heredado...quizá sea mejor buscar otras piezas en mejor estado, que requieran menos inversión.
Yo en el reloj que he invertido más en restaurar (de hecho, el único que he mandado a restaurar parcialmente) es un Certina heredado de mi abuelo. Y en ese caso no le pusimos plexi nuevo (pulí yo el que tenía) ni corona nueva (muy gastada) porque yo quería que mantuviese los que tenía y tocaba mi abuelo. Se restauró esfera, se limpiaron agujas y se limpió y aceitó el movimiento, que es lo que estaba como nuevo. Pero sinceramente, si me hubiese encontrado ese mismo Certina, en el estado en que estaba, en un anuncio de venta, habría pasado de él a no ser que estuviese muy, muy barato.
Ahora, lo que dicen algunos compañeros es verdad: el calibre es un calibrazo, parece estar bastante mejor que lo demás (frecuente en relojes de esa época), y una vez restaurado tienes un verdadero clásico de una gran (en aquella época) manufactura, que sigue siendo una gran marca hoy día. Si te ha entrado por el ojo, sabiendo que ya el calibre merece la pena si está bien, y tienes el dinero para gastarlo, quédate con él, que te lo prepare bien el Maestro, y terminarás teniendo un gran reloj.
Suerte con la decisión.