junker
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El Facón: Cuchillo, genralmente recto y puntiagudo, comúnmente con una “Guardia” o “Cruz” metálica que impide que la mano que lo empuña resbale hacia el filo cortando la mano del dueño, separando de esta manera el mango de la hoja.
Puede tener vaina metálica (tipo bayoneta) o de cuero...
Su uso es común en Argentina, Uruguay, Sur del Brasil, Paraguay y también Chile...
Los mas lujosos tienen mango y vaina de plata... también los hay de alpaca o plata alemana (como los que fotografío mas abajo)... Pueden tener en escasas ocasiones adornos en oro...
Su hoja puede tener también dos filos y ser utilizado solamente como “daga” de pelea.
Los hay de todo tamaño
Se llama “verijeros”, a los mas pequeños (de menos de 15 cm.) que se llevan en la faja, en la parte delantera... Generalmente estos se utilizan para faenas diarias y para comer...
Los de mayor tamaño, son utilizados para trabajos mas pesados, y también para la pelea o “esgrima gaucha”...
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Muerto su dueño, se traspasa de generación en generación, como legado... Es tradición, que el hijo mayor, herede el cuchillo de su padre...
En caso de ser el hombre “un gaucho de mala vida”, o “pendenciero”, preferirá utilizar uno tipo “daga” que le ayude en su trabajo...
Era común también, el uso de dos cuchillos, o sea uno para matar y otro para comer...
Posteriormente, en épocas de “matones”, “compadritos” y “malevos”; se utilizaban dagas mas pequeñas, para el duelo criollo (cuanto mas pequeña la daga, mas valiente el malevo, se decía), incluso se llevaban en el cinto o en los bolsillos internos del saco como si fuera un revólver...
Los facones y dagas, estuvieron siempre presentes en la historia y la literatura de mi país... Así, por citar algunos ejemplos:
...Y al callar la voz fatal, “Lechuza” besaba la Cruz de un puñal...
Cuando apuntó el mediodía, ya estaba echada su suerte,
lo halló echado, ya inerte, un cabo que iba al relevo...
Era el último “Malevo”, se fue con rumbo a la muerte...
pero esta su corazón donde llore un bandoneón
(Lechuza, Tango)
O las famosas “Milongas” escritas por Jorge Luis Borges:
...Me acuerdo, fue en “Balvanera”,
En una noche lejana,
Que alguien dejó caer el nombre... de un tal “Jacinto Chiclana”,
Algo se dijo también, de una esquina y de un cuchillo.
Los años nos dejan ver, el entrevero y el brillo...
“Jacinto Chiclana”: Milonga, del escritor mencionado, donde el autor nos habla sobre la vida de un Malevo, tal como se lo imagina, pues se trata de alguien que no conoció en realidad)
También: Nicanor Paredes, otra milonga de Borges
...Lo veo con paso firme,
Cruzar su “feudo” .. “Palermo”...
El bigote un poco gris,
Pero en los ojos, el brillo
Y cerca del corazón: el bultito del cuchillo,
El cuchillo de esa muerte, de la que no le gustaba hablar,
Alguna desgracia, de cuadreras (carreras de caballos) o de tabas (juego popular en el que se apuesta por dinero, también refiriéndose a las piernas de la mujer)....
.....Si entre la gente de faca (cuchillo) se armaba algún entrevero,
El lo paraba de golpe, de un grito, o con el talero (látigo para el caballo),
Hoy está muerto y con el,
cuanta memoria se apaga,
de aquel Palermo perdido
Del baldío y de la daga...
Nos dan clara muestra que en la poesía del Tango se hablaba mucho de los antiguos Barrios de Buenos Aires que aún existen, pero hoy son totalmente diferentes (Balvanera; Palermo, etc).... y también de los cuchillos y sus dueños...
Algunos pasaron a la historia. Tal el caso de la famosa daga de Don “Juan Moreira”, cuyo verdadero nombre dicen que era “Juan Gregorio Blanco”, hijo del Gallego Mateo Blanco y de Ventura Núñez... El padre era un feroz “Mazorquero” (soldado del Dictador Don Juan Manuel de Rosas)... a quien el propio “Rosas”, le hizo llevar el mensaje que contenía la orden para que lo fusilen... Es así que su padre, para protegerlo, antes de su desgraciado final, pidió que se le cambie el nombre de Juan Blanco por el de Juan Moreira a su hijo, para evitar que luego de su muerte también su hijo fuera perseguido...
Pasados los años, A este Juan Moreira, no se le ocurre mejor cosa que prestarle la suma de 10.000 pesos a un tal Sardetti (comerciante italiano), con el solo recaudo de sellar contrato dándose la mano... Al intentar cobrar su deuda, el tal Sardetti se negó a pagarle, motivo por el cual Moreira decidió meterle 10 puñaladas (una por cada 1000 pesos que le debía)...
Así siguió su historia hasta que se consiguió un trabajo como “Guardaespaldas” de un importante político de la época Don Adolfo Alsina... Quien en agradecimiento de sus servicios, lo recompensó, regalándole una Daga que hoy está en un museo y es pieza histórica...
Foto
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Generalmente, entre la empuñadura y el gavilán lleva una media luna y más corrientemente con forma de “S”, que es lo que hacía de “Cruz”...
Antiguamente se hacían partiendo de uso de una bayoneta o de un sable roto, o en desuso.
También eran muy comunes, los fabricados partiendo del uso de una hoja de una lima. Cuando pasa de media vara de largo, se le llama caronero, porque el gaucho lo lleva, por su tamaño, debajo de las caronas, o sea, los bastos de su montura...
Bueno aquí fotos de los que tengo yo.
Son tres “verijeros” de Alpaca y el de arriba tiene unos adornos en oro...
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Espero les interese y les guste la reseña, después abro otro temas , con otros que me hice yo.... Saludos...
Puede tener vaina metálica (tipo bayoneta) o de cuero...
Su uso es común en Argentina, Uruguay, Sur del Brasil, Paraguay y también Chile...
Los mas lujosos tienen mango y vaina de plata... también los hay de alpaca o plata alemana (como los que fotografío mas abajo)... Pueden tener en escasas ocasiones adornos en oro...
Su hoja puede tener también dos filos y ser utilizado solamente como “daga” de pelea.
Los hay de todo tamaño
Se llama “verijeros”, a los mas pequeños (de menos de 15 cm.) que se llevan en la faja, en la parte delantera... Generalmente estos se utilizan para faenas diarias y para comer...
Los de mayor tamaño, son utilizados para trabajos mas pesados, y también para la pelea o “esgrima gaucha”...

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Muerto su dueño, se traspasa de generación en generación, como legado... Es tradición, que el hijo mayor, herede el cuchillo de su padre...
En caso de ser el hombre “un gaucho de mala vida”, o “pendenciero”, preferirá utilizar uno tipo “daga” que le ayude en su trabajo...
Era común también, el uso de dos cuchillos, o sea uno para matar y otro para comer...
Posteriormente, en épocas de “matones”, “compadritos” y “malevos”; se utilizaban dagas mas pequeñas, para el duelo criollo (cuanto mas pequeña la daga, mas valiente el malevo, se decía), incluso se llevaban en el cinto o en los bolsillos internos del saco como si fuera un revólver...
Los facones y dagas, estuvieron siempre presentes en la historia y la literatura de mi país... Así, por citar algunos ejemplos:
...Y al callar la voz fatal, “Lechuza” besaba la Cruz de un puñal...
Cuando apuntó el mediodía, ya estaba echada su suerte,
lo halló echado, ya inerte, un cabo que iba al relevo...
Era el último “Malevo”, se fue con rumbo a la muerte...
pero esta su corazón donde llore un bandoneón
(Lechuza, Tango)
O las famosas “Milongas” escritas por Jorge Luis Borges:
...Me acuerdo, fue en “Balvanera”,
En una noche lejana,
Que alguien dejó caer el nombre... de un tal “Jacinto Chiclana”,
Algo se dijo también, de una esquina y de un cuchillo.
Los años nos dejan ver, el entrevero y el brillo...
“Jacinto Chiclana”: Milonga, del escritor mencionado, donde el autor nos habla sobre la vida de un Malevo, tal como se lo imagina, pues se trata de alguien que no conoció en realidad)
También: Nicanor Paredes, otra milonga de Borges
...Lo veo con paso firme,
Cruzar su “feudo” .. “Palermo”...
El bigote un poco gris,
Pero en los ojos, el brillo
Y cerca del corazón: el bultito del cuchillo,
El cuchillo de esa muerte, de la que no le gustaba hablar,
Alguna desgracia, de cuadreras (carreras de caballos) o de tabas (juego popular en el que se apuesta por dinero, también refiriéndose a las piernas de la mujer)....
.....Si entre la gente de faca (cuchillo) se armaba algún entrevero,
El lo paraba de golpe, de un grito, o con el talero (látigo para el caballo),
Hoy está muerto y con el,
cuanta memoria se apaga,
de aquel Palermo perdido
Del baldío y de la daga...
Nos dan clara muestra que en la poesía del Tango se hablaba mucho de los antiguos Barrios de Buenos Aires que aún existen, pero hoy son totalmente diferentes (Balvanera; Palermo, etc).... y también de los cuchillos y sus dueños...
Algunos pasaron a la historia. Tal el caso de la famosa daga de Don “Juan Moreira”, cuyo verdadero nombre dicen que era “Juan Gregorio Blanco”, hijo del Gallego Mateo Blanco y de Ventura Núñez... El padre era un feroz “Mazorquero” (soldado del Dictador Don Juan Manuel de Rosas)... a quien el propio “Rosas”, le hizo llevar el mensaje que contenía la orden para que lo fusilen... Es así que su padre, para protegerlo, antes de su desgraciado final, pidió que se le cambie el nombre de Juan Blanco por el de Juan Moreira a su hijo, para evitar que luego de su muerte también su hijo fuera perseguido...
Pasados los años, A este Juan Moreira, no se le ocurre mejor cosa que prestarle la suma de 10.000 pesos a un tal Sardetti (comerciante italiano), con el solo recaudo de sellar contrato dándose la mano... Al intentar cobrar su deuda, el tal Sardetti se negó a pagarle, motivo por el cual Moreira decidió meterle 10 puñaladas (una por cada 1000 pesos que le debía)...
Así siguió su historia hasta que se consiguió un trabajo como “Guardaespaldas” de un importante político de la época Don Adolfo Alsina... Quien en agradecimiento de sus servicios, lo recompensó, regalándole una Daga que hoy está en un museo y es pieza histórica...
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Generalmente, entre la empuñadura y el gavilán lleva una media luna y más corrientemente con forma de “S”, que es lo que hacía de “Cruz”...
Antiguamente se hacían partiendo de uso de una bayoneta o de un sable roto, o en desuso.
También eran muy comunes, los fabricados partiendo del uso de una hoja de una lima. Cuando pasa de media vara de largo, se le llama caronero, porque el gaucho lo lleva, por su tamaño, debajo de las caronas, o sea, los bastos de su montura...
Bueno aquí fotos de los que tengo yo.
Son tres “verijeros” de Alpaca y el de arriba tiene unos adornos en oro...
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Espero les interese y les guste la reseña, después abro otro temas , con otros que me hice yo.... Saludos...