Fotaza. Has enfocado a las agujas, la esfera es menos nítida, le has dado una textura muy agradable, las inscripciones parecen resbalar sobre una superficie de nácar casi negro.
Es sólo un reloj sobre una mesa. ¿Tal vez hay un portátil ahí detrás, ese cuerpo negro y fino tras el reloj? Nada especial. Y sin embargo... tan llenos de vida, de posibilidades. Cuentas -¿o sugieres?- muchas historias de ese reloj.
Admiro profundamente tu técnica. Pero sobre todo, admiro tu mirada de fotógrafo. Ese saber que te permite dar vida a los objetos a través de fotos.
Por cierto, un reloj precioso. Sin pretensiones, con un diseño elegante y funcional.