Impresionante. No te has quedado corto eligiendo reloj de bolsillo, desde luego. La caja es preciosa, con esa decoración, pero el calibre no se queda atrás, una maravilla, con esos puentes tan bonitos. La esfera es preciosa, tanto las grafías de las horas como el segundero, las manecillas, una pasada. Y a mí también me gusta la pátina que tiene, que sin afear el reloj le da esa solera de tantos años. Observar el reloj es como un viaje en el tiempo, a una época en que las cosas de categoría tenían una elegancia y una clase especiales, como los autos Hispano-Suiza o las fachadas modernistas de las casas, llenas de decoraciones florales y de elegancia. Tengo yo muchas ganas de un reloj de bolsillo desde hace tiempo, pero me temo que no aspiraré a tanto.
Después de aguantar un rato la tele, que está de pena, por fin he visto algo bello para irme a la cama a soñar con ese Longines...que lo disfrutes mucho compañero...:zzz::zzz: